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| Santo Sepulcro ante la Tribuna de Plaza del Carmen (GLC) |
Desde luego no hay una mejor manera de denominar cómo recuerdo aquel día que como una auténtica Passio. Y no porque participara en el magno acontecimiento -qué más me hubiera gustado a mí- sino precisamente por cómo lo pasé. El día anterior ya había sido complicado. Nuestra hija Esperanza, con casi año y medio, había estado enferma, vómitos y diarrea, que me obligaban a cambiarla de ropa, lavarla y limpiar el suelo del salón cada media hora. Pero el sábado amaneció peor. Cuando Miguel Ángel regresó a casa después de trasladar al Santísimo Cristo de la Misericordia hasta la Catedral nos fuimos a Urgencias del Hospital Maternal. Más de cinco horas en la sala de espera, el reconocimiento del pediatra, la consabida dieta blanca y suero y de nuevo a casa. Ya eran más de las cuatro de la tarde y Miguel Ángel, sin comer, debía irse de nuevo al principal templo de la ciudad. Un trozo de pizza recalentado de la croissantería de la esquina sirvió para calmar el hambre.
Yo ya estaba resignada a que la tarde, si Esperanza y sus vómitos me dejaban, sería tranquila, frente al televisor, con una oreja pegada a la radio y la otra esperando la llamada telefónica de mi marido. Pero... En mi tarea de abnegada madre yo también había caído víctima del virus, así que... Si no era la pequeña a la que había que limpiar, era yo la que visitaba el baño. Una auténtica tarde de pasión. Recuerdo, aunque más por lo que he oído y visto en fotos, que por lo que realmente presencié, que la lluvia deslució lo que debería haber sido parte del Evangelio en la calle, que los plásticos se adueñaron del paisaje, y que Miguel Ángel me llamó para decirme que, como el Cristo de la Misericordia no iba a salir, se iba a meter bajo la parihuela del Santo Sepulcro, que era portada por la cuadrilla del Gran Poder. Por eso, cuando recuerdo la Passio Granatensis, sólo espero que alguien vuelva a tener la idea de organizarla, para poder vivirla intensamente.
Y pensar que me había pasado los días anteriores planeando dónde situarme con el carrito de la pequeña, para que pudiera disfrutar de todos los pasos...
María del Carmen Sánchez, presentadora de Canal 21 y hermana de la Esperanza
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